La falleba ocupa un lugar especial entre los herrajes de cierre, esto no solo se debe a su rica historia, sino a su utilidad, pues sigue siendo la solución perfecta en la mayoría de las situaciones donde se requiere un bloqueo firme y rápido de las hojas de puertas y ventanas.
La Real Academia Española establece que la etimología de la palabra falleba proviene del árabe hispánico para la palabra maẖlab, que significa garra u hoz.
De acuerdo a Cerrajeros económicos, la falleba es una varilla de hierro acodillada en sus extremos, sujeta en varios anillos y que sirve para asegurar puertas o ventanas.
La falleba como sistema de cierre
La falleba es un herraje de cerramiento que permite asegurar las hojas de cualquier puerta o ventana, independientemente de su altura.
Para lograrlo utiliza unos ganchos o garfios en sus extremos que se engarzan al marco y fijan la hoja, accionados por un mecanismo de palanca o picaporte.
Otros nombres comunes para estos sistemas de cierre son españoletas y cremonas, aunque existen pequeñas diferencias técnicas entre la acción de cierre de cada uno de estos tipos.
Todas tienen en común el permitir que las ventanas y puertas se aseguren firmemente a sus marcos sin limitar el tamaño de las mismas, se recomienda el asesoramiento de un cerrajero experto para que despeje cualquier duda sobre el tema
¿Cómo funciona una cerradura de fallebas?
La españoleta original fue la pionera, y debe su nombre a ser una invención totalmente española, Esta usa el giro de una barra como principio para el cierre.
La españoleta necesita de dos acciones, una vertical para encajar y otra horizontal para girar los garfios y asegurar.
La cremona y la falleba usan el desplazamiento, no el giro, para fijar la puerta o ventana al marco. De este modo se simplifica la acción, que puede ser realizada ahora mediante un simple picaporte.
Especialistas que han trabajado con Cerraduras Orengo, a quienes puedes contactar visitando el sitio https://seguritek.es/cerraduras-orengo/, confirman que las fallebas se han terminado imponiendo a los demás tipos de cerramiento, especialmente en las ventanas francesas en madera.
¿Cómo se instala una cerradura de fallebas?
Las fallebas se pueden instalar embutidas dentro del canto de la puerta o ventana, o sobrepuestos a las mismas.
Las fallebas embutidas se prefieren, debido sus ventajas energéticas, pues reducen las pérdidas térmicas.
Las fallebas sobrepuestas son mucho más sencillas de instalar, aunque menos usadas en ventanas y puertas modernas.
Estas requieren la instalación de guías para las varillas, que evitan que se tuerzan, aun se recomienda tener un cerrajero especializado para el montaje.
¿De qué material se fabrican las fallebas?
Antiguamente las fallebas se fabricaban de hierro forjado, y requerían el trabajo de un artesano herrero que las realizaba a medida y bajo pedido.
La fabricación moderna en serie ha simplificado el trabajo del carpintero, que tiene varillas de varios tamaños y toda clase de picaportes para elegir.
El material más utilizado es el acero, al cual se le aplican recubrimientos decorativos en caso de instalarse sobrepuesta a la hoja.
La mayoría de los fabricantes incluyen en sus catálogos acabados parecidos a los de las forjas tradicionales, que son apropiados para restauraciones de casas antiguas.
También son comunes los acabados con recubrimientos cromados o de latón pulido, e incluso existen fallebas realizadas completamente en acero inoxidable.