Lucir persianas en tu hogar no sólo otorga un toque de elegancia, también han resultado ser elementos de gran funcionalidad para proteger de los dañinos y molestos rayos del sol a los habitantes, así como el mobiliario que compone la vivienda.
Es probable que desconozcas todas las opciones que el mercado te ofrece para vestir las ventanas de tu hogar, hoy vas a tener la oportunidad de evaluar los diferentes tipos de persianas más recomendadas y decidir cuál adquirir.
Breve historia de las persianas
Desde la antigüedad existe el uso de las persianas, su función era cubrir las puertas pequeñas, de esta manera impedir el paso de la luz, sólo permitían que pasara algunos rayos solares, en ese momento el cerrajero aún no era una figura reconocida para trabajar con las persianas.
La primera persiana moderna se patentó en 1769, empezó a fabricarse de manera industrial en Londres. Las primeras persianas venecianas fueron traídas por Hunter Douglas cerca del año 1946. En China las persianas se fabricaban de bambú, sin embargo este material resultó ser inútil para proteger del frio.
Uno de los beneficios de las persianas es que proporcionan un correcto aislamiento, es decir permite conservar el calor generado por la calefacción de los edificios. Cuando las persianas cubren las ventanas o puertas, la temperatura se estabiliza, ayudando a mantener la calidez del hogar sin tener que abusar del termostato.
Tipos de persianas
En el mercado existe mucha variedad de estas, por eso al momento que ha decidido comprar persianas es recomendable consultar con el cerrajero de confianza, porque necesita saber exactamente cuál es el modelo más conveniente, porque ellas ofrecen un aislamiento respecto al exterior, tanto acústica como térmicamente.
En el mercado encontrarás los siguientes tipos de persianas.
Venecianas. Están armadas por lamas que suben y bajan a través de un sistema de cordeles. Existen otros modelos de venecianas en donde las lamas se pliegan sobre ellas mismas por una varilla que funciona de guía, pueden girar para permitir un poco el paso de la luz. Requieren poco mantenimiento, son recomendadas para personas que sufren de alergia porque no acumulan ácaros.
Persianas alicantinas. Eran muy utilizadas en las casas, porque eran económicas, decorativas y funcionales. Las tradicionales son de madera, se pueden encontrar en bambú y PCV. Se enrollan y desenrollan por medio de una cuerda, y siempre permiten el paso del aire, protegen del exceso de luz exterior, nos proporciona una gran intimidad. Su instalación es muy sencilla y al momento de repararla es muy fácil, las lamas de las persianas se engarzan mediante grapas de acero que le dan cierta movilidad.
Persianas enrollables. Son de material textil, se enrollan sobre un tubo redondo que está ubicado en la parte superior. Son perfectas para tener un control de la cantidad de luz que entra en la casa. El sistema de enrollado y desenrollado se puede dotar de medios mecánicos, lo que facilita su uso en caso de ventanales de grandes dimensiones.
Persianas de aluminio o metálicas. En este momento este tipo presenta numerosas ventajas porque ofrece un alto nivel de aislamiento, también son un elemento de seguridad en la vivienda, porque están elaboradas en un material muy resistente, no necesita mantenimiento, no son inflamables, y los puedes encontrar en diferentes colores.